JURISTA DE INSTITUCIONES PENITENCIARIAS
¿Qué es un jurista-criminólogo?
En un establecimiento penitenciario intervienen varios perfiles profesionales. Uno de ellos es el del Jurista, que forma parte del Cuerpo Superior de Técnicos de Instituciones Penitenciarias. Su creación se materializó en el Reglamento Penitenciario de 1981 donde se le otorgó el nombre de Jurista-Criminólogo.
En primer lugar, hemos de decir que al Jurista se le requiere poseer la titulación de Derecho, perteneciendo por tanto al nivel A1 dentro de las categorías de funcionarios. Accede al puesto mediante oposición.
El trabajo de Jurista es totalmente vocacional y la persona que quiera dedicarse a ello tendrá que contar con importantes cualidades como son la atención, escucha, empatía y ganas de ayudar a los internos para que alcancen la reeducación y resocialización.
Para saber más sobre esta oposición, vamos a hablar con Daniel Delgado Díaz, opositor a jurista de instituciones penitenciarias, para conocer su experiencia en este trayecto. Daniel comenzó la carrera de Derecho en 2012 y la terminó en diciembre de 2016. Entonces decidió presentar su currículum en diferentes empresas pero, al no tener éxito, aprovechó para aprobar el B2 de inglés. Una amiga le comentó sobre las oposiciones del Cuerpo Superior Técnico de Instituciones Penitenciarias en la rama de Juristas, y Daniel empezó a interesarse por ellas, ya que en la carrera ni siquiera le habían mencionado esta oposición. Así, en septiembre de 2017 empezó a estudiarlas, constando las mismas de derecho penitenciario, penal, administrativo, laboral y criminología, además de los temas de organización del Estado.
Agradecemos a Daniel su disposición para hablarnos sobre esta oposición, posible profesión de algunos juristas-criminólogos en un futuro. ¡Su testimonio seguro que os invita a querer saber más!
P. ¡Hola, Daniel! ¿Qué fue lo que te hizo interesarte por esta oposición?
R. Si te soy sincero, al principio no tenía mucha información ya que es una oposición un poco desconocida. Pero cuando vi el temario, y las funciones del puesto poco a poco me fui convenciendo, ya que es una profesión que te permite tener contacto con profesionales de muchas ramas distintas de conocimiento como psicólogos y trabajadores sociales, lo cual también me llamó mucho la atención ya que te permite conocer otros campos profesionales y eso siempre es bueno.
P. ¿Has estado alguna vez en prisión? (De visita, claro).
R. No. Me gustaría, para así conocer mi futuro lugar de trabajo, pero es difícil si no tienes contacto.
P. ¿Conoces a algún jurista de instituciones penitenciarias?
R. Sí, mi preparador. Él es de Valencia y yo de un pueblo de Sevilla así que preparamos las clases por Skype. No hay muchos preparadores de esta oposición.
P. Entre los temas que estudias para poder aprobar, ¿cuáles te parecen más interesantes?
R. El Derecho Penitenciario me ha gustado mucho, es una materia que en la carrera de Derecho no había tocado apenas y es bastante interesante. El tema de Penal también me atrae bastante, aunque contaba con ventaja pues tenía conocimientos sobre esta materia. Respecto a la Criminología estoy empezando con ella y aunque es muy entretenida y amena a veces me cuestan algunos conceptos, sobre todo al estudiar antiguas teorías y escuelas.
P. ¿Cuáles son las labores que desempeña un jurista de instituciones penitenciarias?
R. Las funciones se recogen en el Reglamento Penitenciario de 1981 en el art. 281. Entre ellas están: estudiar los expedientes de los internos y hacer los informes procedentes sobre clasificación, progresión o regresión de grado; estudiar la información recibida sobre cada interno cuando éste entra en el centro penitenciario; controlar los plazos de los distintos recursos y actuaciones; asistir como vocal en las reuniones de la Comisión Disciplinaria, el Equipo Técnico o la Junta Económico-Administrativa…; informar a los internos de su situación procesal, penal o penitenciaria si estos lo solicitan y de los recursos y quejas que pueden interponer; asesorar jurídicamente a la Dirección y cumplir cuantas tareas le sean encomendadas por el Director del establecimiento.
P. ¿Por qué profesionales está formado el Equipo Técnico?
R. Está formado por Juristas-Criminólogos, Psicólogos, Pedagogos y Sociólogos.
P. ¿Se convocan muchas plazas? ¿En qué Comunidad Autónoma te vas a presentar?
R. No muchas, para la convocatoria de este año salieron 15 plazas para Jurista-Criminólogo y 15 para Psicólogos. Este año se han aumentado a 45 entre ambas especialidades por lo que para Jurista-Criminólogo habrá 22-23 plazas, aun así se necesitan más medios. La oposición es estatal, la única Comunidad Autónoma en la que podría presentarme por separado es Cataluña.
P. En el Reglamento Penitenciario de 1981 se le otorgó el nombre de Jurista-Criminólogo. ¿Crees que debería ser un requisito para obtener plaza ser graduado en Criminología, o es una profesión más específica de Derecho?
R. Creo que es más específica de Derecho sobre todo porque aparte del tema penitenciario y penal, el Jurista-Criminólogo también se ocupa de la parte administrativa del centro penitenciario: presupuestos, contratos administrativos, etc. Aun así no se debe desdeñar la formación más específica de los criminólogos, a mi parecer el puesto debería dividirse en dos por un lado Juristas y por otro lado Criminólogos, cada uno con sus funciones. Por otra parte, hoy en día tal y como está la regulación sí creo que debería permitirse el acceso a los graduados en Criminología a estas oposiciones, aunque luego deberían recibir más formación del Derecho Administrativo que aplicarán en el puesto.
P. Daniel ya se ha presentado una vez y, aunque aprobó, no superó el corte. ¿Cómo es el examen?
R. Son 4 exámenes. El primero es un tipo test de 120 preguntas, con 4 respuestas cada pregunta siendo solo una la correcta. Cada 3 fallos se te quita una pregunta acertada. Algunas preguntas son bastante rebuscadas pero se puede superar incluso sin llevar mucho tiempo de estudio como ha sido mi caso.
El segundo es el examen oral, consta de 3 exposiciones o “cantes”, el de Penitenciario, el de Penal y el de la parte de Criminología, Administrativo y Laboral. Sacas dos bolas de cada parte y eliges una de cada, debiendo hacer las 3 exposiciones en un máximo de 45 minutos, teniendo previamente 15 minutos para preparártelas.
El tercer examen es un texto en inglés, francés, italiano… el idioma que elijas, que has de traducir al castellano.
El cuarto examen es un caso práctico.
Una vez aprobados los 4 exámenes pasas un periodo de formación en el Centro de Estudios Penitenciarios y en un centro penitenciario.
P. Por último, ¿qué le dirías a aquellas personas que quieren opositar a juristas de instituciones penitenciarias?
R. Lo primero es que tengan claro que la vida del opositor es una vida de sacrificio. Son 8 horas diarias sentado delante de un escritorio con los apuntes, como si fuera un trabajo, así que la constancia y la paciencia son muy importantes. También lo es el descanso por supuesto, hay que dormir y despejarse (yo recomiendo hacer deporte, que tantas horas sentado pasan factura). Es bueno tener el apoyo de tus amigos, familia… así podrás apoyarte en ellos cuando estés un poco harto porque, siendo realistas, casi todo opositor llegado un momento piensa en dejarlo. No puedes compararte con nadie, solo lograrás desmotivarte.
Por último más enfocado a esta oposición, decirte que, si te lo estás pensando puedes leerte el Reglamento Penitenciario de 1996, que es un resumen del temario de Derecho Penitenciario y sabrás por dónde van los tiros. Si te gusta, adelante, no te arrepentirás. Es duro, pero se aprende mucho, coges mucha cultura jurídica y si apruebas tendrás un trabajo para toda la vida que presumiblemente te gustará bastante ejercer. Así que ¡ánimo!
Esperamos que el testimonio de Daniel os haya sido de ayuda y, si no conocíais esta oposición, ya conocéis una salida más aquellos que hayáis estudiado Derecho y estéis interesados en el mundo penitenciario.
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